¿Cuáles son los pueblos más bonitos de cada Comunidad Autónoma española?

Explora con nosotros la esencia de España en un viaje por los pueblos más bonitos de cada Comunidad Autónoma. Desde las montañas del Norte hasta las costas del Sur, te mostramos nuestra selección personal de los que consideramos que son únicos. ¿Listo para saltar al Plan D: (d)escubrir los rincones más encantadores de España? Pues coge tu lista de destinos y tacha con nosotros aquellos pueblos que hayas visitado.

🏡 Los pueblos más bonitos de cada Comunidad Autónoma española

Sumergirse en la belleza de los pueblos españoles es adentrarse en un viaje lleno de encanto, historia y tradición. Nuestro país es uno de los más privilegiados ya que contamos con una variedad de paisajes, lenguas y tradiciones, que prácticamente ningún otro tiene. En este artículo recorreremos juntos desde las costas mediterráneas hasta las cumbres de los Pirineos, cada Comunidad Autónoma. Aunque no nos ha sido fácil decantarnos por un sólo pueblo de cada Comunidad, te dejamos los que para nosotros son los pueblos más bonitos de España.

📍 Andalucía: Ronda, Málaga

Ronda es uno de esos lugares que simplemente te dejan boquiabierto. Estás caminando por calles empedradas, rodeado de casas blancas con ese encanto andaluz tan característico, y de repente te topas con unos miradores que te dejan sin aliento. Desde allí, podrás contemplar acantilados impresionantes, con el río Guadalevín serpenteando bajo tus pies. Pero lo que realmente destaca es su Puente Nuevo, una obra maestra de la ingeniería del siglo XVIII que une las partes antigua y moderna de la ciudad sobre el desfiladero. Y no podemos dejar de mencionar la gastronomía, productos locales de primera calidad que te hacen sentir que estás probando el sabor auténtico de la tierra.

📍 Aragón: Albarracín, Teruel

Albarracín, un tesoro escondido entre las montañas de Teruel. Este pueblo medieval situado en la parte más elevada del terreno rocoso en el que se encuentra, destaca por su arquitectura donde las casas de colores tierra se amontonan unas sobre otras, creando un laberinto de callejuelas estrechas y sinuosas. A cada paso, te encuentras con monumentos históricos como la muralla que rodea la ciudad, o la imponente Torre del Andador que ofrece vistas panorámicas del paisaje de los alrededores. Además, Albarracín es el lugar perfecto para los amantes del aire libre, con numerosas rutas de senderismo a través de los bosques y cañones cercanos, como el impresionante Parque Natural de las Sierras de Albarracín y los Montes Universales. ¡No te vayas sin probar los platos típicos! El ternasco asado o las migas aragonesas te dejarán con ganas de mucho más.

📍 Asturias: Cudillero, Asturias

Cudillero es un pequeño  pueblo pesquero situado entre verdes colinas y el azul intenso del Mar Cantábrico. Te recibe con un despliegue de casitas coloridas que se escalonan por la ladera, creando un anfiteatro natural que mira hacia el puerto. Pasear por sus estrechas calles empedradas es una fantasía, con cada rincón ofreciendo vistas y pequeñas sorpresas como plazas escondidas y miradores panorámicos.

El puerto de Cudillero es el corazón del pueblo, lleno de actividad con barcos pesqueros que traen el mejor marisco fresco del día. Aquí, la gastronomía es una auténtica celebración de los sabores del mar, con platos como la caldereta de pescado y marisco o arroz negro, que probamos en uno de sus restaurantes. No te pierdas el famoso «Pixín» (rape), una de las especialidades locales que deleita a todos los visitantes. Además de su encanto marinero, Cudillero es una base perfecta para ir a explorar la impresionante costa asturiana, con playas salvajes, acantilados escarpados y rutas de senderismo que te llevan por paisajes naturales inigualables.

📍 Baleares: Deià, Mallorca

Deià, en la isla de Mallorca, es un paraíso mediterráneo que combina belleza, cultura y tranquilidad. Este pueblo que se sitúa en la Serra de Tramuntana con unas vistas más que privilegiadas al mar Mediterráneo, ha sido durante mucho tiempo un refugio para artistas, escritores y músicos atraídos por su mágica atmósfera y su luz incomparable. ¿A quién no le gustaría vivir en un pueblo tranquilo que mezcla los dos grandes rivales: montaña y mar?

Las calles de Deià repletas de casas de piedra están presididas por la iglesia de San Juan Bautista, un edificio del siglo XIV. También es conocido por su escena cultural. El legado de figuras como el poeta Robert Graves, que hizo de este lugar su hogar, se siente en cada rincón. Su antigua residencia es ahora un museo dedicado a su vida y obra, ofreciendo una visión de la historia literaria del pueblo. La gastronomía de Deià es otra de sus grandes atracciones. Los restaurantes locales, algunos de los cuales tienen vistas espectaculares al mar, ofrecen una cocina que combina ingredientes frescos de la isla con recetas tradicionales mallorquinas. Platos como el tumbet, la sobrasada y los mariscos frescos son una delicia.

📍 Canarias: Garachico, Tenerife

Garachico es un de los pueblo más bonitos de Tenerife y de España. Este famoso pueblo costero, fundado en el siglo XV, está lleno de calles adoquinadas y edificios coloniales bien conservados. A lo largo del paseo marítimo, las piscinas naturales de El Caletón, formadas por antiguas erupciones volcánicas, te ofrecen un lugar para bañarte y disfrutar del océano Atlántico. La historia de Garachico es impresionante, marcada por la erupción del volcán Trevejo en 1706, que cambió la fisonomía del lugar pero no su espíritu resiliente. El Castillo de San Miguel, una fortaleza del siglo XVI que resistió la lava, es una de las principales atracciones de la localidad. Un ejemplo excepcional de resiliencia en Tenerife y en nuestro país.

La gastronomía de Garachico es otro de sus grandes atractivos. Los restaurantes locales donde podrás saborear platos tradicionales canarios como las papas arrugadas con mojo, el pescado fresco y el conejo en salmorejo, son los míticos guachinches. Además, Garachico es un excelente punto para recorrer el lado Norte de la Isla de Tenerife, con el Parque Nacional del Teide a poca distancia y numerosas rutas de senderismo de paisajes volcánicos, bosques de laurisilva y vistas espectaculares.

📍 Cantabria: Santillana del Mar, Cantabria

Santillana del Mar se encuentra en Cantabria, y es un pueblo que antes de visitarlo ya te está mintiendo. Es conocida como «la villa de las tres mentiras» porque ni es santa, ni es llana, ni tiene mar. Es en realidad un auténtico tesoro patrimonial. Pasear por sus calles rodeadas de casas nobles y casonas blasonadas, es como adentrarse en un cuento medieval. El casco histórico de Santillana del Mar es un laberinto de calles estrechas. La Colegiata de Santa Juliana y su claustro románico son una parada obligatoria que deberás hacer además de visitar sus museos y centros culturales.

Pero Santillana del Mar no es solo historia. Su cercanía a las famosas Cuevas de Altamira, conocidas como la «Capilla Sixtina del arte rupestre», añade un toque prehistórico a la visita. Aquí, puedes maravillarte con la Neocueva y sus réplicas de las pinturas paleolíticas que datan de hace más de 15.000 años. Los restaurantes y tabernas del pueblo ofrecen delicias de la cocina cántabra que deleitan a los paladares más exigentes como el cocido montañés, la quesada pasiega y los sobaos.

📍 Castilla-La Mancha: Alcalá del Júcar, Albacete

Alcalá del Júcar es un pueblo de Castilla-La Mancha, concretamente de Albacete, que sorprende por su impresionante ubicación y su belleza singular. Este municipio se encuentra enclavado en un profundo cañón formado por el río Júcar, con casas que parecen estar colgando de las escarpadas laderas y calles estrechas que serpentean hasta la cima. El corazón del pueblo está coronado por el imponente castillo árabe del siglo XII, desde donde se pueden obtener vistas panorámicas de los alrededores. A sus pies, las casas blancas se amontonan en un laberinto de callejuelas empinadas que conducen a la Plaza de la Iglesia, hogar de la Iglesia de San Andrés, un ejemplo de arquitectura renacentista en Albacete.

Uno de los aspectos asombrosos de Alcalá del Júcar son sus cuevas, como la Cueva del Diablo y la Cueva del Garadén, que han sido adaptadas como bares y restaurantes, dónde podrás disfrutar de experiencia experiencia culinaria sin igual. Estas cuevas, excavadas en la roca, muestran cómo los habitantes aprovecharon la geografía para crear espacios habitables y de entretenimiento. La gastronomía no se queda atrás, con platos tradicionales manchegos que deleitan a cualquier visitante. Entre las especialidades destacan el gazpacho manchego, el cordero a la brasa y las migas ruleras. Disfruta de estos manjares en alguno de los restaurantes con vistas al río o en las mencionadas cuevas.

Alcalá del Júcar no solo es un destino de gran belleza natural y arquitectónica, sino también un lugar lleno de actividades al aire libre. El río Júcar ofrece oportunidades para el piragüismo y la pesca, mientras que los alrededores del pueblo son ideales para el senderismo y las rutas en bicicleta.

📍 Castilla y León: Frías, Burgos

En este artículo de los pueblos más bonitos de cada Comunidad Autónoma no podía faltar Frías. Nuestro pueblo favorito de la provincia de Burgos, es uno de los pueblos más encantadores y pintorescos de Castilla y León. Perchado sobre una peña a orillas del río Ebro, este pequeño municipio medieval ofrece una mezcla irresistible de historia, arquitectura y paisajes naturales. El castillo de los Duques de Frías, que data del siglo X, domina la silueta del pueblo desde su imponente posición sobre el peñasco. Desde sus almenas, podrás disfrutar de vistas panorámicas del valle del Ebro y del casco histórico. A los pies del castillo, las casas colgantes, que parecen desafiar la gravedad al asomarse al precipicio.

El casco antiguo de Frías está repleto de callejuelas y edificios históricos, como la Iglesia de San Vicente y el Puente Medieval, que se instalan sobre el Ebro con sus arcos majestuosos y su torre defensiva en el centro. Este puente es uno de los mejores ejemplos de la arquitectura medieval en la región. La gastronomía de Frías es un deleite para los amantes de la buena comida como nosotros. Los restaurantes ofrecen platos tradicionales como el lechazo asado, las morcillas de Burgos y quesos artesanales, acompañados de vinos de la Ribera del Duero. 

📍 Cataluña: Besalú, Girona

Besalú, en Girona, es uno de los pueblos más visitados de Cataluña. Es conocido por su impresionante patrimonio medieval, destacando el puente de entrada, y su ambiente relajado. Situado a orillas del río Fluvià, Besalú te recibe con un majestuoso puente románico del siglo XII, cuya estructura de piedra y torres fortificadas te hacen reflexionar sobre su importancia en el pasado. El casco antiguo de Besalú es un laberinto de calles, plazas y edificios históricos medievales. No te puedes perder la Plaza Mayor, rodeada de casas porticadas, y la iglesia de Sant Pere, un impresionante templo de arquitectura románica.

Besalú también es famoso por su antiguo barrio judío, que incluye un baño ritual judío (mikvé) del siglo XII, uno de los mejor conservados de Europa. Los restaurantes y tascas locales ofrecen una variedad de platos catalanes, como la escudella, el suquet de peix y los embutidos artesanales. No te vayas sin probar los dulces típicos, como los xuixos y los panellets. Desde Besalú, podrás explorar la comarca de La Garrotxa, famosa por su Parque Natural de la Zona Volcánica.

📍 Comunidad de Madrid: Chinchón, Madrid

Chinchón es el pueblo más bonito de la Comunidad de Madrid, con el permiso de Buitrago de Lozoya y Patones de Arriba. Simplemente, tiene un encanto especial. Situado a solo unos 50 kilómetros de la capital, Chinchón es una escapada perfecta para conocer un entorno rural en Madrid. 

El corazón de Chinchón es su famosa Plaza Mayor, una de las plazas más singulares y pintorescas de España por su forma irregular, y los edificios que lo rodean todos ellos con balcones de madera pintados en un icónico verde-azulado. La plaza ha sido escenario de mercados, celebraciones y corridas de toros desde el siglo XV.  La Torre del Reloj, que se alza solitaria tras la desaparición de la iglesia a la que pertenecía, y la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, que alberga una pintura de Goya, son paradas obligatorias. El Castillo de los Condes, aunque en ruinas, ofrece una visión del pasado feudal de la región.

La gastronomía de Chinchón es otro de sus grandes atractivos y si lo combinas con la plaza, no tiene igual. Famoso por su anís, el pueblo también deleita a los visitantes con platos tradicionales como el cordero asado, el cochinillo y las gachas. Los restaurantes y mesones locales, muchos de ellos situados alrededor, y dentro de de la Plaza Mayor, ofrecen una experiencia culinaria genial. Además, Chinchón es conocido por su mercado medieval, que se celebra anualmente trayendo puestos de artesanía, comida y espectáculos callejeros.

📍 Comunidad Foral de Navarra: Ujué, Navarra

Llegamos a la Comunidad Foral de Navarra y nos topamos con Ujué. Este pintoresco pueblecito ofrece vistas panorámicas que abarcan desde los Pirineos hasta la Ribera del Ebro, lo que lo convierte en un lugar perfecto para disfrutar de la belleza natural de Navarra. El corazón de Ujué es su iglesia-fortaleza de Santa María, un ejemplo de arquitectura medieval que data del siglo XI. Este edificio combina elementos románicos y góticos, y es famoso por su impresionante retablo y las vistas espectaculares desde sus torres. 

Pasear por las calles estrechas y empedradas de Ujué es una obligación. Las casas de piedra, con sus tejados de teja roja y balcones llenos de flores, crean una atmósfera acogedora, y la hospitalidad de sus habitantes te hará sentir como en casa. Las rutas de senderismo que rodean el pueblo ofrecen oportunidades para descubrir la naturaleza y la historia de la región. Desde Ujué, se pueden realizar excursiones a los viñedos de la Ribera del Ebro o a los Pirineos navarros, disfrutando de una rica biodiversidad.

Los platos tradicionales como las migas, las costillas de cordero y la caldereta de pastor son imprescindibles. Además, Ujué es conocido por sus almendras garrapiñadas, un dulce local que no puedes dejar de probar. Los restaurantes y tabernas utilizan ingredientes locales y recetas transmitidas de generación en generación.

📍 Comunidad Valenciana: Guadalest, Alicante

Una vez más visitamos la Comunidad Valenciana y llegamos a Guadalest, en la provincia de Alicante. Encajado en lo alto de un peñón, este pueblo ofrece vistas sobre el valle del Guadalest y el embalse de color turquesa que lleva su nombre. Su impresionante ubicación y su historia lo convierten en un destino imperdible para quienes buscan descubrir la esencia de la región. El Castillo de San José, una fortaleza del siglo XI construida por los musulmanes, domina el horizonte de Guadalest. 

El casco antiguo de Guadalest, invita a perderse y explorar cada rincón, como la Plaza de San Gregorio, con su fuente y su ambiente tranquilo. No muy lejos de allí se encuentra la Casa Orduña, una mansión señorial convertida en museo de la historia local y la vida de las familias nobles que habitaron el lugar. Guadalest también es conocido por su variada oferta de museos, como el Museo de Microminiaturas, donde se pueden ver obras diminutas que solo se aprecian con lupa, y el Museo Etnológico, que muestra la vida rural y las tradiciones de la región.

¿Aún no conoces las delicias tradicionales de la cocina valenciana? El arroz con conejo y caracoles, la olleta de blat (un guiso de trigo) y las cocas (tortas saladas) son solo algunos de los platos que debes de catar, aunque nosotros no seamos muy fans de los caracoles… Muy cerca encontrarás la Sierra de Aitana y la Sierra de Xortà con sus paisajes impresionantes y la flora y fauna locales.

📍 Extremadura: Trujillo, Cáceres

Visitamos Cáceres y como no íbamos a mencionar Trujillo, un pueblo que respira historia. Famoso por ser la cuna de conquistadores como Francisco Pizarro, destaca por su Plaza Mayor, corazón de la ciudad, y una de las plazas más hermosas y monumentales de España. Rodeada de edificios históricos, como la Iglesia de San Martín y la Casa-Museo de Pizarro, la plaza es un punto de encuentro donde se celebran festivales, mercados y eventos. La estatua ecuestre de Francisco Pizarro preside la plaza, recordando su legado.

El castillo de Trujillo, una fortaleza árabe del siglo IX situada en la parte alta de la ciudad, ofrece vistas panorámicas espectaculares del casco histórico y los campos vecinos. Desde sus murallas, se puede apreciar la extensión de la ciudad vieja con sus tejados rojos, torres y calles empedradas. Las casas señoriales, los palacios renacentistas y las iglesias góticas nos muestran el poderío que tuvo este enclave. Entre los monumentos más destacados se encuentran el Palacio de los Duques de San Carlos, el Palacio de los Marqueses de la Conquista y la Iglesia de Santa María la Mayor, un impresionante templo gótico.

Deberás probar platos tradicionales extremeños como el cordero a la caldereta, la perdiz escabechada y los embutidos de cerdo ibérico. Los quesos, especialmente el famoso queso de la Serena y la Torta del Casar, son imprescindibles, aunque del olor y sabor fuerte de este último te vas a acordar ajajaja… Además, para nosotros los golosos, encontramos dulces como las perrunillas y las floretas, el broche perfecto para cualquier comida. Trujillo también es conocido por su Semana Santa, una de las más importantes y emotivas de Extremadura, así como por su famosa Feria del Queso, que atrae a visitantes de todo el mundo para degustar las mejores variedades de quesos artesanales de la región.

📍 Galicia: Betanzos, A Coruña

Betanzos, en la provincia de A Coruña, Galicia, destaca por sus calles y su gastronomía deliciosa. Este pueblo, es conocido como la «capital del gótico gallego», y ofrece una combinación perfecta de belleza arquitectónica y un ambiente gallego relajado. El casco antiguo de Betanzos es un laberinto de calles estrechas y plazas que se enlazan entre sí. La Plaza Hermanos García Naveira es el centro del pueblo, rodeada de edificios centenarios y adornada con una fuente central.

Uno de los principales atractivos de Betanzos es su patrimonio gótico. La iglesia de San Francisco y la iglesia de Santa María del Azogue son dos ejemplos de esta arquitectura, con sus detallados retablos y elegantes rosetones. Además, el Parque del Pasatiempo, creado por los hermanos García Naveira, es un lugar lleno de esculturas, grutas y jardines que reflejan el espíritu filantrópico y visionario de estos benefactores locales.

La gastronomía de Betanzos es famosa en toda Galicia, especialmente por su tortilla de patatas, considerada por muchos como la mejor de España. Pero no te vayas sin catar otros platos tradicionales gallegos, como el pulpo a la gallega, los pimientos de Padrón y los mariscos frescos. No puedes dejar de probar el caldo gallego y el lacón con grelos, la esencia de la cocina gallega.

Betanzos también es conocido por sus fiestas y tradiciones, como la Romería de los Remedios y las fiestas de San Roque, que incluyen desfiles, música y bailes tradicionales. La Semana Santa de Betanzos, con procesiones y su entorno natural, con el río Mandeo y sus verdes paisajes.

📍 La Rioja: Briones, La Rioja

Briones es el encantador pueblo vinícola que hemos escogido para representar a los pueblos bonitos de La Rioja. Destaca su casco histórico con la Plaza Mayor, su fuente y edificios de piedra. Aquí, se encuentra el Ayuntamiento, un edificio del siglo XVIII, una muestra más de la riqueza de la localidad. La iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, de estilo gótico, fue construida entre los siglos XVI y XVIII, y cuenta con una gran torre barroca y un interior adornado con retablos y distintas obras de arte sacro. No muy lejos, podrás encontrar el Castillo de Briones. Aunque está en ruinas, ofrece vistas sobre el valle del Ebro y los viñedos circundantes.

La cultura del vino es una parte integral de la vida en Briones. El pueblo alberga el Museo Vivanco de la Cultura del Vino, uno de los museos del vino más importantes del mundo. Aquí, podrás aprender sobre la historia del vino, sus procesos de elaboración y su influencia en diversas culturas. Las bodegas de La Rioja, muchas de ellas de renombre internacional, ofrecen visitas guiadas y catas que te permitirán disfrutar de los excepcionales vinos de la región.

La gastronomía de Briones es tan rica como sus vinos, o casi tanto… Platos tradicionales riojanos como las patatas a la riojana, el cordero al chilindrón y las chuletillas al sarmiento, son otras formas que tiene La Rioja de conquistarte. Además, es famosa por sus embutidos y quesos que complementan perfectamente las catas de vinos locales. Entre las fiestas y tradiciones de Briones, una de las más destacadas es la Batalla del Vino, una fiesta un tanto curiosa de nuestro país. Durante esta festividad, los participantes se lanzan vino unos a otros en una divertida batalla.

📍 Región de Murcia: Moratalla, Murcia

Moratalla es uno de esos pueblos que parecen sacados de un cuento. Ubicado en el noroeste de la Región de Murcia, te espera con los brazos abiertos. En lo alto del pueblo, el Castillo-Fortaleza del siglo IX se destaca sobre las casas apiñadas en la ladera de la montañas. La iglesia de la Asunción, con su elegante arquitectura renacentista, es otro de los imprescindibles de Moratalla. Su exterior sobrio contrasta con un interior ricamente decorado. No muy lejos, la Casa de Cristo, un santuario situado en las afueras del pueblo de paz y espiritualidad.

Pero Moratalla no es solo historia y arquitectura. La Sierra de Moratalla es un verdadero paraíso para los amantes de la naturaleza. Con rutas de senderismo para escapar del calor de Murica por bosques de pinos, gargantas y montañas, es el lugar perfecto para disfrutar del aire libre, ya sea caminando, en bici o simplemente paseando. La gastronomía en Moratalla es una fiesta para el paladar. Imagina degustar un cordero a la brasa, un arroz con conejo y caracoles, o un gazpacho jumillano, todo acompañado de los mejores embutidos y quesos locales. Y no olvidemos los dulces tradicionales, como los alfajores y las tortas de Pascua.

📍 País Vasco: Hondarribia, Gipuzkoa

Hondarribia, en la provincia de Gipuzkoa, es una auténtica joya del País Vasco. Se sitúa en la desembocadura del río Bidasoa, y destaca su casco antiguo conocido como «Parte Vieja». Es una mezcla armoniosa de casas de piedra con balcones de madera y flores que desatan todos los sentidos. La Plaza de Armas y la Plaza de Gipuzkoa, invitan a perderse entre bares de pintxos y tiendas de artesanías, mientras se respira el ambiente floral y acogedor.

El Castillo de Carlos V se alza sobre la bahía del mar Cantábrico y de la vecina Francia. Este bastión fue construido en el siglo XIX para defender la costa de los piratas. Muy cerca, la iglesia parroquial de Nuestra Señora del Manzano se alza con su arquitectura gótico-renacentista. Para los amantes de la buena comida, llegamos a la tierra de los pintxos, tapas vascas que deleitan el paladar con su variedad de sabores y texturas. Además, si eres de comer en abundancia, los platos tradicionales como el bacalao al pil-pil, el marmitako (guiso de bonito) y el txangurro (centollo relleno) son tus opciones.