Navidad en Colmar: la joya de la Alsacia

¡Sumérgete en la magia de la Navidad en Colmar y descubre por qué esta ciudad alsaciana es un destino navideño sin igual! Situada en el corazón de la región de Alsacia, Colmar se transforma cada invierno en un verdadero cuento de hadas, con calles empedradas llenas de luces, aromas festivos y decoraciones que realzan sus casas de entramado de madera y arquitectura medieval. Este rincón de Francia es ideal para quienes buscan una experiencia única, donde la atmósfera navideña lo envuelve todo.

Visitar Colmar en esta temporada significa descubrir algo especial en cada rincón. En este artículo, te guiaremos por los mejores lugares para visitar, incluyendo sus famosos mercadillos de Navidad de Colmar, su arquitectura de cuento y, por supuesto, la gastronomía alsaciana.

Caminar por las calles de Colmar en Navidad es adentrarse en un mundo decorado al detalle. Las luces brillan sobre las fachadas de colores, mientras los escaparates de tiendas y las ventanas de casas se adornan con guirnaldas y figuras navideñas. Desde el primer momento, el ambiente navideño en Colmar te envuelve, transportándote a un entorno de calidez y encanto inigualable. Nuestro niño interior volvió a despertar.

El diseño festivo no se limita a unas simples luces; cada calle se convierte en un escenario donde muñecos, figuras de madera, árboles decorados y adornos de todos los tamaños traen la Navidad a cada esquina. La participación de los habitantes en esta decoración hace que el espíritu festivo se sienta aún más. Cada rincón de la ciudad, te atrae, cada calle te llama a recorrerla… símplemente Colmar te atrapa.

Uno de los principales atractivos de Colmar en Navidades son sus mercadillos navideños, que llenan de vida las plazas de la ciudad con sus luces, aromas y artesanías. La ciudad cuenta con varios mercados repartidos en diferentes puntos emblemáticos, cada uno con su propio estilo y oferta especial.

• Place des Dominicains: Este mercado se encuentra en la plaza de la iglesia de los dominicos, ofreciendo una atmósfera mágica. Aquí encontrarás artesanías únicas, desde decoraciones navideñas hasta productos de arte local.

• Place de l’Ancienne Douane: Este es uno de los mercados más grandes y tradicionales. Con la histórica Casa Koïfhus como telón de fondo, sus puestos ofrecen desde dulces típicos hasta productos de decoración que destacan la influencia de la cultura alemana en Alsacia.

• Mercado Infantil en la Petite Venise: Pensado para los más pequeños, este mercado se ubica en el pintoresco barrio de la Petite Venise y es ideal para disfrutar en familia. Los niños pueden disfrutar de paseos en un carrusel, mientras los adultos exploran productos artesanales y degustan vino caliente.

Además, en cada mercadillo, puedes probar especialidades como el “pain d’épices” (pan de especias), las galletas “bredele” y el famoso vino caliente especiado, que añaden sabor a esta experiencia festiva. Aunque debemos defender que este vino es alemán…

El casco antiguo de Colmar es una de las zonas más bellas para recorrer, especialmente en Navidad. En cada paso te encontrarás con antiguas casas con sus vigas de madera vistas, que se enriquecen con la iluminación navideña y las decoraciones de las ventanas. Esta zona histórica, está llena de edificios muy bien conservados y calles totalmente decoradas por las que podrás caminar durante horas.

Durante la Navidad, la Maison des Têtes, o Casa de las Cabezas, se convierte en uno de los puntos de atracción más fotografiados de Colmar. Esta casa renacentista, famosa por las más de cien figuras esculpidas en su fachada, cobra vida en la temporada navideña, siendo aún más visitada que durante el resto del año. La decoración festiva realza las esculturas, haciendo que parezcan personajes de un cuento de invierno. Este edificio histórico, que data del siglo XVII, muestra impresionante de la arquitectura alsaciana, e ícono cultural que resalta el ingenio artístico de la Alsacia.

Además, en el patio interior del edificio suele haber exposiciones y actividades navideñas, creando un ambiente acogedor donde los visitantes pueden detenerse a admirar la fachada y disfrutar de la decoración de temporada.

La Rue des Merchands es la calle principal de Colmar, un paraíso para los amantes de la fotografía y para los supermodelos que estáis deseando sacaros una foto para el christmas navideño. Las casas que flanquean la calle siguen la tradicional estructura de casa Alsaciana, con tejados de gran pendiente y sus fachadas blancas con entramados de madera. Y como todos sabemos… en Navidad todo reluce un poquito más, con toda la calle repleta de adornos y luces. Sin lugar a dudas, una de las mejores cosas que hacer en Colmar, es dar un paseo por la Rue des Merchands y disfrutar de su toque mágico navideño.

Algunos de los edificios históricos que puedes encontrar en esta calle son:

• Casa Pfister: Residencia de la familia Pfister entre 1841 y 1892.

• Casa Schongauer: Fue la residencia de la familia Schongauer, construida en el siglo XV y está declarada como monumento histórico.

• Museo Bartholdi: fue la casa donde nació el creador de la estatua de La Libertad de Nueva York.

¡Bienvenido a nuestro lugar favorito de Colmar! La Petite Venise es uno de los barrios más reconocidos de Colmar. Sus canales, que serpentean entre las casas de colores y entramado de madera, crean una imagen idílica durante cualquier época del año, pero en Navidad, este barrio cobra vida de una manera única. Las luces navideñas reflejadas en el agua de los canales y la decoración de las casas dan un toque especial, que hace que pasear por Petite Venise sea una experiencia mágica. En Navidad, el barrio parece salido de una pintura, un lugar ideal para tomar fotografías que capturen el espíritu navideño de Colmar.

Ahora, cierra los ojos por un momento e imagina deslizarte suavemente sobre las tranquilas aguas de los canales que serpentean entre las casas. Una pequeña barca te lleva a través de este laberinto acuático, regalándote vistas exclusivas de las fachadas adornadas y sus reflejos danzantes en el agua. A medida que avanzas, las casas se alzan sobre ti, mientras que va oscureciendo y resaltan cada vez más las luces de colores. Aunque suene a fantasía, así es como nos sentimos nosotros allí.

El Museo Unterlinden es otra joya de Colmar y, durante la Navidad, también se transforma junto con el resto de la ciudad. Este museo está situado en un antiguo convento dominico, y su arquitectura medieval complementa a la perfección el ambiente histórico de Colmar. El museo es famoso por albergar el “Retablo de Issenheim” de Matthias Grünewald, una obra maestra del arte renacentista.

En Navidad, el Museo Unterlinden organiza actividades y visitas guiadas que permiten a los visitantes aprender más sobre la historia y el arte de la región. La iluminación invernal y los detalles festivos en el claustro del museo aportan un ambiente único.

Ya que te estamos contando sobre esculturas, en Colmar encontrarás una que te resultará muy familiar: el Manneken-Piss. Esta curiosa escultura data de 1922 y tiene un trasfondo especial: conmemora la liberación de la ciudad de Colmar, recordando el sufrimiento compartido entre Francia, los Países Bajos y Bélgica por la guerra. La figura del Manneken-Piss es entrañable y, lo más divertido, es que la visten con trajes diferentes en diversas ocasiones. ¡Incluso en Navidad, la pequeña estatua se abriga con ropa festiva para sumarse al espíritu de la temporada!

Recorriendo las calles de Colmar, nos topamos con la imponente Colegiata de San Martín. Su fachada, una obra maestra del gótico flamígero, hará que quedes maravillado. Junto a uno de sus laterales, en estas fechas se instala uno de los mercadillos más grandes de Colmar, por lo que poder disfrutar de la esencia de la Navidad, junto a uno de los edificios más importantes y bonitos de la ciudad, es una experiencia indescriptible.

Destaca su alta aguja que apunta hacia el cielo, junto con los grandes ventanales decorados y los pináculos que sobresalen del tejado. El interior de la Colegiata es un espacio sagrado lleno de espiritualidad y solemnidad. Los impresionantes vitrales filtran la luz, creando una atmósfera mística. En su interior nos cautivaron sus enormes columnas, junto con el coro, aunque debido a un incendio, perdió gran parte de su patrimonio artístico. La visita al interior es gratuita y se puede recorrer libremente respetando los horarios de culto.

Presidida por la estatua de Auguste Bartholdi, la Plaza del Viejo Mercado se erige como una de las plazas más importantes de Colmar. Su nombre rinde homenaje al imponente Koifhus, un edificio del siglo XV, catalogado como el edificio más antiguo de la ciudad,  que fue empleado como almacén, edificio de aduanas y mercado de la ciudad. Pero es en diciembre cuando la Plaza del Viejo Mercado realmente cobra vida. Se convierte en el corazón de uno de los mercadillos navideños más impresionantes de Colmar. Aquí, entre los puestos repletos de regalos y las tentadoras delicias culinarias, se siente el espíritu navideño en su máxima expresión

Este mercado tradicional se encuentra junto a los canales de la Pequeña Venecia de Colmar. En su interior podrás encontrar gran cantidad de puestos de comida, tiendas para comprar diferentes productos locales y cafeterías dónde recargar fuerzas para seguir visitando Colmar. Junto a una de sus fachadas podrás encontrar al Manneken-Piss Alsaciano. 

¿Te ha pasado alguna vez sentirte transportado a otro lugar sin moverte de casa? Así es como nos sentimos al descubrir la sorprendente Estatua de la Libertad en una rotonda. Pero no en la bulliciosa Nueva York, ¡sino en un lugar tan único como Colmar!

La réplica fue inaugurada en 2014, conmemorando el fallecimiento de su creador, Frederic Auguste Bartholdi. Imagina una estatua que no solo pesa unas asombrosas 3 toneladas, sino que también posea más de 12 metros de altura, superando a la réplica parisina. Podrás seguir las placas en el suelo, que actúan como pequeñas guías, hasta llegar al monumento.

Adéntrate a uno de los lugares más visitados de Colmar, el Museo del Juguete. Se encuentra ubicado estratégicamente en una de las calles principales. Este museo ha transformado el antiguo escenario de un cine en un reino de fantasía para los niños, y para los que ya no somos tan niños… Desde 1993, se ha expuesto una colección de juguetes desde el siglo XIX hasta los más actuales, siendo un ejemplo de cómo ha avanzado la tecnología y del cambiado de los gustos de las personas con los años.

La gastronomía alsaciana es otro de los puntos fuertes de Colmar en Navidad, y los mercadillos están repletos de delicias típicas que te invitan a probar algo nuevo. Entre las especialidades, destacan:

• Pain d’épices: Un pan de especias tradicional que se ofrece en diferentes formas y tamaños. Este dulce, con toques de miel y especias como canela y clavo, es un clásico de la Navidad alsaciana.

• Bredele: Estas galletas navideñas, disponibles en distintas versiones, son una tradición en Alsacia. Se elaboran con ingredientes variados, desde almendras hasta frutas secas, y se presentan en cajas decorativas ideales para regalar.

• Vino caliente: Conocido como «vin chaud,» esta bebida especiada es perfecta para combatir el frío mientras se recorre la ciudad. Preparado con vino tinto, canela, anís estrellado y otros condimentos, el vino caliente es un imprescindible de la temporada. Es el homólogo al glühwein alemán.

• Tarte flambée: Aunque no es un plato exclusivo de Navidad, la tarte flambée es un símbolo de la gastronomía alsaciana. Esta “pizza” alsaciana, cubierta de crema, cebolla y panceta, es una opción deliciosa para quienes desean algo más sustancioso. En alemania se conoce como Flammkuchen y es otro de los platos que están en disputa de cuál es su origen real si Francia o Alemania. Nosotros barremos hacia casa, asique se lo damos a Alemania.

Para sacar el mayor provecho de una visita a Colmar en Navidad, hay algunos consejos y actividades que harán la experiencia más completa:

• Visitar entre semana: Los fines de semana, Colmar va a estar muy pero que muy concurrida debido a su popularidad. Si decides visitar entre semana podrás disfrutar de un ambiente más tranquilo y menos aglomerado.

• Tour guiado navideño: Existen recorridos guiados que permiten conocer los rincones menos evidentes de la ciudad y aprender más sobre su historia y tradiciones navideñas.

• Visita nocturna: La iluminación navideña de Colmar se aprecia especialmente bien en la noche, cuando las luces crean un ambiente mágico. Recorrer las calles después de que se pone el sol es una de las mejores maneras de disfrutar la ciudad en esta época.

• Compra de artesanías: En los mercados, se pueden encontrar productos únicos hechos a mano, desde decoraciones navideñas hasta textiles y cerámicas. Comprar artesanías locales no solo apoya a los artesanos locales, sino que también permite llevarse un pedacito de Alsacia a casa.

Si bien Colmar es un destino de ensueño en Navidad, la región de Alsacia está llena de otros lugares encantadores que bien valen una visita. Algunos de los pueblos y ciudades cercanas también se visten de gala para la Navidad, convirtiéndose en destinos mágicos para quienes desean prolongar la experiencia.

• Eguisheim: Este pequeño pueblo alsaciano, conocido por sus callejuelas circulares y coloridas casas de entramado de madera, parece sacado de un cuento de hadas. Durante la Navidad, se ilumina y se llena de decoraciones festivas, creando un ambiente acogedor y pintoresco.

• Selva Negra: La Selva Negra, o Schwarzwald en alemán, es una región montañosa y forestal en el suroeste de Alemania. Este bosque denso y grandes montañas te ofrecen una postal espectacular. Puedes explorar pueblos de estilo tradicional alemán, probar la famosa tarta de Selva Negra y disfrutar de actividades al aire libre como senderismo y ciclismo. La región también alberga lagos y cascadas, como las impresionantes Cascadas de Triberg, hogar del reloj cuco más grande del mundo.

• Estrasburgo: La capital de Alsacia y hogar de uno de los mercados navideños más antiguos de Europa. Estrasburgo combina la arquitectura gótica con decoraciones navideñas espectaculares, destacando su majestuosa catedral y la zona de La Petite France, un rincón encantador con canales y casas de entramado.

• Riquewihr y Kaysersberg: Estos pueblos son famosos por sus mercados navideños y su arquitectura alsaciana bien conservada. Durante las festividades, se adornan con guirnaldas, luces y aromas festivos, ofreciendo una experiencia navideña tradicional.

• Castillo de Haut-Kœnigsbourg: Sobren una colina a unos 10 km al oeste de Sélestat, el Castillo de Haut-Kœnigsbourg es una fortaleza histórica que ofrece vistas panorámicas de los Vosgos y la llanura de Alsacia. Este castillo medieval, restaurado en el siglo XX, te permitirá sumergirte en la historia mientras exploras sus salas, murallas y torres. La visita ofrece una visión fascinante de la vida en un castillo en la Edad Media y es un destino que verdaderamente te aconsejamos que no te saltes.

Aparcar en Navidades en Colmar puede ser tarea imposible, pero esperamos que tengas la misma suerte que tuvimos nosotros y puedas conseguir aparcamiento rápidamente. El aparcamiento en la calle en las zonas cercanas al casco histórico está regulado en tres zonas: Azul, de aparcamiento exclusivo para residentes de la zona. Verde, máximo permitido 8 horas con un precio de 1.30€ la hora. Naranja, 8 horas máximo con un precio de 1.70€ la hora.

Sin embargo existen aparcamientos gratuitos en Colmar, con la suerte de que en uno de ellos encontramos plaza para aparcar. Los cuatro aparcamientos más grandes son:

• Parking Lacarre: Grautito, sólo se pagan las horas de madrugada, 387 plazas.

• Parking Dreyfus: Gratuito, cuenta con 334 plazas de aparcamiento.

• Parking Park des Expositions: Gratuito, es el más alejado y grande, con 1433 plazas.

• Parking Le Grillen: nosotros aparcamos aquí, gratuito y con gran cantidad de plazas libres, 121 plazas en total.