¿Te vienes con nosotros a recorrer Navarra? En nuestro itinerario de 5 días pudimos descubrir todos los secretos de la Comunidad Foral. Visitamos la Selva de Irati, nos perdimos por pequeños pueblos encantadores como: Ochagavía, Ujué, Lesaka, Elizondo… y también visitamos las cuevas de Mendukilo, Urdax y Zugarramurdi. Pero eso no ha sido todo, entramos en el Castillo de Olite, el Castillo de Javier y el Monasterio de Leyre… ¡Todo esto en 5 días! ¿Te unes a nosotros en un nuevo Plan D, descubrir Navarra?
🤔 ¿Por qué visitar Navarra?
Navarra, una comunidad autónoma española ubicada al Norte de la Península Ibérica, que se distingue por su rica historia, diversidad paisajística y cultura. Limitando con Aragón, La Rioja, el País Vasco y Francia, Navarra se sitúa como un destino que decidimos explorar tras haber recorrido otras provincias del Norte, como Lleida, Huesca, Asturias y Cantabria. Motivados por la belleza del norte y recomendaciones de familiares y amigos, decidimos aventuramos y descubrir los secretos de Navarra reservados para nosotros. Te recomendamos conocer Navarra por estas 4 razones principales:
- Paisajes impresionantes: Navarra cautiva a quienes la visitamos con una amplia gama de paisajes que van desde lo árido hasta lo frondoso del bosque. En primer lugar, las Bardenas Reales representan un paisaje único y sorprendente. Este paraje semidesértico, declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO, nos deslumbró con sus formaciones rocosas erosionadas por el viento y el agua, formando un paisaje que parece sacado de otro mundo. Por otro lado, encontramos la Selva de Irati, con sus verdes valles pirenaicos que te ofrecen un contraste que vas a tardar tiempo en asimilar. Densos bosques, grandes prados y ríos cristalinos, los Pirineos Navarros son un verdadero paraíso.
- Pueblos con encanto: Navarra está repleta de pueblos preciosos que debes visitar, cada uno con su propio encanto y personalidad. Uno de los pueblos más visitados es Puente la Reina, conocido por ser punto de encuentro de peregrinos que recorren el Camino de Santiago. Su puente románico sobre el río Arga y su conjunto histórico-artístico lo convierten en un lugar imprescindible. Otro pueblo es Estella-Lizarra, con sus calles empedradas, plazas ajardinadas y edificios medievales. Sus monumentos, como la Iglesia de San Pedro de la Rúa y el Palacio de los Reyes de Navarra, son una muestra de la belleza arquitectónica de la región. Zugarramurdi es otro pueblo que no puedes dejar de visitar, famoso por sus cuevas y por su historia vinculada a la brujería.
- Pamplona y los Sanfermines: Pamplona, la capital de Navarra, es famosa en todo el mundo por ser la ciudad de los Sanfermines, una de las fiestas más emblemáticas de España. Cada año, del 6 al 14 de julio, Pamplona se transforma en epicentro de los encierros, atrayendo a miles de visitantes de todas partes del mundo. El evento más famoso de los Sanfermines son los encierros, donde corredores compiten delante de toros por las estrechas calles del casco antiguo de Pamplona. Pero no son sólo encierros. Durante nueve días, Pamplona se llena de música, bailes, desfiles, fuegos artificiales y eventos culturales. La Plaza del Castillo se convierte en el epicentro de la fiesta, donde lugareños y visitantes se reúnen para disfrutar de la comida, la bebida y el ambiente festivo.
- Misterio y leyendas: Navarra está impregnada de un aura misteriosa y cargada de leyendas que han perdurado a lo largo de los siglos, desde cuevas misteriosas hasta valles embrujados. Uno de los lugares más enigmáticos de Navarra es el pueblo de Zugarramurdi, conocido por su conexión con la brujería y la magia. En sus cuevas, se dice que se llevaron a cabo aquelarres y rituales oscuros durante la Edad Media. Otro lugar sorprendente es el Valle de Baztán, un valle rodeado de montañas y bosques frondosos. Aquí, se cuentan historias de brujas y seres sobrenaturales que habitan en los rincones más remotos, oscuro y fascinante. Además, Navarra alberga numerosos castillos y fortalezas repletos de intrigas y tragedias a lo largo de la historia. Castillos como el de Javier, asociado con la figura de San Francisco Javier, o el de Olite, con su arquitectura gótica, están envueltos en historias de amor, traición y misterio.
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📆 ¿Cómo organizamos nuestra ruta por Navarra?
Decidimos visitar Navarra por las recomendaciones que no parábamos de escuchar a familiares y amigos sobre esta región. Esto despertó nuestra curiosidad y las ganas de comprobar si todo lo que habíamos oído era cierto. Para organizar nuestra ruta, primero investigamos los puntos de interés y los marcamos sobre el mapa. Una vez tuvimos claro qué lugares queríamos visitar y cuántos días teníamos disponibles, nos dispusimos a trazar nuestra ruta.
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Dada la extensión del territorio navarro, decidimos dividir nuestra estancia en dos alojamientos diferentes: uno en el norte, donde pasaríamos 3 días, y otro en el sur, para los 2 días restantes. Esta elección optimizó nuestro tiempo, desplazamientos y sobre todo el gasto de gasolina. Optamos por comenzar visitando primero los lugares más alejados, en el norte, y luego ir descendiendo hacia el sur. Es una buena forma de hacer que el camino de vuelta a casa sea un poco más corto.
Una vez que tuvimos nuestro itinerario planificado, nos pusimos a reservar tours, comprar entradas para visitar cuevas, monumentos y comparar opciones de entradas combinadas de las que te iremos hablando posteriormente. Con todos los preparativos listos, sólo quedaba subir al coche y comenzar nuestra ruta por Navarra.
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- Free tour por Pamplona, la mejor forma para conocer la ciudad 📷
- Excursión al monasterio de Leyre y Castillo de Javier. ¡Dos imprescindibles de Navarra! 🏰
- Suelta toda tu adrenalina con un Tour en Buggy por las Bardenas Reales 🔥
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📷 Qué ver Navarra en 5 días: nuestro itinerario
👉 Día 1. Selva de Irati, Ochagavía y Roncesvalles
Si hay algo por lo que Navarra es conocida, aparte de los famosos San Fermines, es por la impresionante Selva de Irati. Este bosque, que se extiende entre Navarra y Francia, es uno de los mayores y mejor conservados de toda Europa, sólo siendo superado por la Selva Negra en Alemania, destacando por sus majestuosas hayas y abetos. Decidimos explorar este paraíso natural realizando una ruta lineal desde la Ermita de la Virgen de las Nieves hasta el Embalse de Irabia. Durante las aproximadamente 2.30 horas de ida y vuelta, disfrutamos de la tranquilidad de la naturaleza, sin encontrarnos con nadie durante todo el recorrido.
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Después de la caminata, nos dirigimos a uno de los pueblos más encantadores de Navarra, Ochagavía. Este pintoresco pueblo está dividido por el río Arduña, que se une al río Zatola para formar el río Salazar dentro del propio pueblo. Antes de comenzar a explorarlo, hicimos una parada en el Asador Sidrería Kixkia para recargar energías con un buen menú del día. Después de comer, cruzamos el Puente Medieval de Ochagavía, lugar ideal para hacer fotos, y adentrarnos en su casco histórico. Recorriendo sus estrechas calles, llegamos a lo más alto para visitar la impresionante Iglesia de San Juan Evangelista, un hermoso templo tanto por fuera como por dentro, que destaca por su retablo que nos dejó sin palabras por la cantidad de esculturas y detalles. El acceso es gratuito.
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Continuando nuestro recorrido, nos dirigimos a Roncesvalles, una pequeña villa cargada de historia. Aquí nada mas aparcar nos topamos con el Silo de Carlo Magno, un pequeño edificio cuadrado ubicado sobre el enterramiento de los combatientes francos caídos en el año 778, es por eso que se le considera el edificio más antiguo de Roncesvalles. Justo al lado, encontramos la Capilla de Santiago, también conocida como la Iglesia de los Peregrinos, un pequeño templo gótico del siglo XIII. Lamentablemente, ambos edificios estaban cerrados, y no pudimos entrar a visitarlos. A escasos metros, nos encontramos con el monumento a la Batalla de Roncesvalles, que rememora la gran batalla en la que las tropas cristianas vencieron a los musulmanes impidiendo se expansión por el resto de Europa.
Para finalizar el día en grande, visitamos la Real Colegiata de Santa María de Roncesvalles, un imponente conjunto monumental de estilo gótico navarro construido por el Rey Sancho VII de Navarra. El acceso a la iglesia es gratuito y quedamos maravillados con las impresionantes vidrieras tras el altar mayor y las majestuosas columnas que nos dieron la bienvenida nada más cruzar la puerta. Te recomendamos ver el templo a oscuras y luego iluminarlo por 1€ para que puedas apreciar el contraste y toda su grandiosidad, fue una experiencia impactante.
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Después de visitar la iglesia, recorrimos el claustro, la galería del rosetón y el mausoleo del Rey Sancho El Fuerte, donde descansan los restos del rey navarro. Nos sorprendieron las vidrieras que narran la batalla en la que Sancho el Fuerte venció a las tropas musulmanas, repletas de detalles y colores. Uno de los tesoros que encontramos fueron unas cadenas de la Batalla de las Navas de Tolosa, arrebatadas por el Rey Sancho a Miramolín, que representan un símbolo de Navarra, y aparecen incluso reflejadas en su escudo.
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La visita a este conjunto tiene un costo de 6€ por persona, con descuentos disponibles para diferentes grupos y condiciones especiales. Después de un día muy intenso y completo, nos dirigimos a cenar en nuestro hotel, listos para enfrentarnos al siguiente día con las pilas cargadas.
👉 Día 2. Lesaka, Zugarramurdi, Cueva de Urdax, Elizondo y Pamplona
En nuestro segundo día en Navarra, nos dirigimos a explorar los encantadores pueblos del norte de la región. Nuestra primera parada fue Lesaka, una pequeña villa con apenas unos 2700 habitantes. Nos enamoraron sus pintorescas casas de piedra, donde las vigas y balcones de madera se pintan de llamativos colores, creando un contraste con la belleza natural de la piedra. Nuestro primer monumento fue la Torre Zabaleta, una antigua torre armería de origen medieval.
A pocos pasos, encontramos la Iglesia de San Martín de Tours, construida en el siglo XVI, donde resalta su impresionante retablo barroco-rococó, convirtiéndola en una de las iglesias más monumentales de Navarra, con dimensiones dignas de una catedral. La entrada es gratuita y suele estar abierta al público. Además de estos monumentos, en Lesaka también pudimos admirar la Casa de Minyurenea, una majestuosa edificación del siglo XV, considerada la más antigua del pueblo; el palacio Bordinea, del siglo XVIII, destacado por su balcón renacentista que ha sido escenario de diversas películas; y la Casa Consistorial, un elegante edificio barroco construido en el siglo XVII.
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Nuestro siguiente destino fue el pueblo de brujas más famoso de España: Zugarramurdi. Rodeado de antiguos caseríos, Zugarramurdi vivió épocas oscuras durante los autos de fe llevados a cabo por la Inquisición, donde varios vecinos fueron condenados a la hoguera bajo acusaciones de brujería. Hoy en día, el pueblo atrae visitantes por su fama de misterioso y sombrío. Apenas aparcamos, nos dirigimos hacia las impresionantes Cuevas de Zugarramurdi, unas cuevas prehistóricas realmente espectaculares.
La visita a las cuevas tiene un costo de 6€ para adultos y 4€ para niños. A través de una red de senderos, puedes adentrarte en diferentes cuevas. Optamos por el camino largo, que rodea todo el complejo y desciende hasta un pequeño río. Dentro de las cuevas, bien iluminadas, descubrimos una antigua calera que data de principios del siglo XVIII. Junto a la cueva principal, encontramos una apertura más pequeña donde se dice que se llevaban a cabo los aquelarres de brujas, rituales demoníacos en los que el demonio era representado como un macho cabrío. Nuestra recomendación es que explores todo el recinto y… ¿quién sabe si te encontrarás con algún ser paranormal?
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Después de explorar las cuevas, regresamos al pueblo para dar un paseo y visitarlo más a fondo. Tuvimos la oportunidad de ver el Museo de las Brujas de Zugarramurdi, con un precio de 6€ para adultos y 4€ para niños, así como la Iglesia de la Asunción, que data del siglo XVIII, que sufrió grandes daños por las tropas de Napoleón en 1793. Desafortunadamente, ambos estaban cerrados cuando llegamos, por lo que te recomendamos reservar las entradas online y comprobar los horarios de apertura, ya que varían según la temporada.
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No muy lejos de Zugarramurdi, encontramos nuestro siguiente destino: las Cuevas de Urdax, un sistema de cuevas famoso por albergar a guerrilleros y contrabandistas en el pasado. Al adentrarnos en la cueva, fuimos recibidos por unos pequeños seres mitológicos llamados ánimas, quienes nos guiaron a través de las galerías y recovecos de la cueva. En el interior fluye un pequeño río subterráneo que atraviesa todo el complejo, que aumenta su caudal los días de lluvia, llegando a producir inundaciones parciales. Nos maravillamos con las formaciones de banderolas, estalagmitas, estalactitas, grandes columnas y alguna que otra medusa, además de divisar algunos murciélagos descansando en el techo. La visita es guiada y tiene una entrada de 7€.
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Después de explorar las cuevas, ya con el hambre acechando, nos dirigimos a Elizondo, donde decidimos parar a comer y recargar energías antes de recorrer sus encantadoras calles. Cruzamos el Puente Txocoto, que atraviesa el río Bidasoa, y nos adentramos en el casco histórico, no sin antes hacer varias fotos de la presa con las pintorescas casas tradicionales de fondo. Para nosotros, Elizondo es uno de los pueblos más boninos del Valle de Baztán, y no necesitas mucho tiempo para darte cuenta del porqué. A pocos metros del puente se alza la Iglesia de Santiago, destacando por su construcción en ladrillos rosados y sus murales decorativos en el exterior.
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Como se nos estaba haciendo tarde, nos dirigimos a Pamplona, donde nos esperaba nuestra guía para realizar el Free Tour por Pamplona. Quedamos en la Plaza del Castillo, ubicada en pleno casco histórico de Pamplona. Durante el recorrido guiado, que duró aproximadamente 2 horas, descubrimos los principales atractivos de la ciudad, como la emblemática Calle Estafeta con su famosa curva, el reloj que marca la cuenta regresiva para los próximos Sanfermines, el Ayuntamiento de Pamplona, la Iglesia de San Saturnino y la majestuosa Catedral de Pamplona, entre otros lugares de interés.
El tour fue excelente y la guía estuvo fenomenal, la recomendamos al 100%. Para culminar este día tan intenso, nos dirigimos al centro para disfrutar de pintxos en diferentes bares, en busca del mejor pintxo de Pamplona. Si quieres conocer más sobre esta encantadora ciudad, te recomendamos que leas nuestro artículo sobre Pamplona.
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👉 Día 3. Cueva de Mendukilo, Nacedero del Urederra, Estella-Lizarra, Puente la Reina y Cerco Medieval de Artajona
A primera hora de la mañana, después de disfrutar del desayuno, nos dirigimos hacia la Cueva de Mendukilo, ubicada en la Sierra de Aralar, que en tiempos pasados fue refugio para pastores y su ganado. Después de una interesante charla con el personal encargado de las visitas y conservación de la cueva, comenzamos nuestra visita guiada por su interior. La cueva está equipada con pasarelas y una iluminación respetuosa con la fauna que la habita.
A medida que nos adentrábamos, nuestro guía nos explicaba cómo se formó la cueva, nos hablaba de los diferentes organismos que viven en la oscuridad, conocidos como troglobiontes o troglobios, y nos mostraba las diversas estructuras que se han ido formando a lo largo de los años. Quedamos impresionados con las amplias cámaras, entre las que destacan el Refugio de Pastores, la Sala de los Lagos y la Morada del Dragón. Para nosotros, esta visita es imprescindible y una forma divertida de sumergirse en el mundo de la espeleología y aprender sobre él. Puedes tener más información en nuestro artículo sobre la Cueva de Mendukilo.
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Tras salir verdaderamente enamorados de lo que consideramos la mejor cueva de Navarra, nos dirigimos a Baquedano, un pequeño pueblo que nos recibió para iniciar la ruta senderista del Nacimiento del Río Urederra. Para realizar esta ruta por la Reserva Natural del Nacedero del Urederra, es necesario reservar tu entrada y pagar el precio correspondiente de 5€ por el aparcamiento. Antes de comenzar la caminata, nos detuvimos en uno de los restaurantes del pueblo para comer, ya que no podíamos comenzar la caminata con el estómago vacío…
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La ruta es circular y recorre el margen del río Urederra, permitiéndonos disfrutar de sus impresionantes aguas cristalinas y un entorno natural tranquilo. La calificamos como una ruta sencilla, ideal para hacer en familia. A lo largo del camino, encontramos varias plataformas de madera desde las que disfrutamos de vistas increíbles de las pozas formadas en el cauce del río.
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Tras la pequeña ruta, nos dirigimos a Estella-Lizarra, fundada en el año 1090 por el Rey Sancho Ramírez de Aragón y Pamplona. Conocida como el Toledo del norte, destaca por la cantidad de monumentos y edificios históricos que alberga. Comenzamos nuestro recorrido en la icónica parada de autobuses en la Plaza de la Coronación y nos dirigimos por las calles del centro hacia la Plaza de los Fueros. Desde allí, callejeamos hasta llegar a la Iglesia de San Miguel Arcángel, un templo del siglo XII construido durante la invasión de Aragón a los navarros. A pocos metros, nos esperaba el Puente de la Cárcel, que cruza el río Ega y data del siglo XII, aunque fue destruido durante la tercera guerra carlista y reconstruido en el siglo XIX.
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Continuamos nuestro recorrido hacia uno de los puntos más altos y hermosos de Estella, la Iglesia de San Pedro de la Rúa, que es nuestra absoluta favorita. Nos quedamos boquiabiertos por su precioso claustro de columnas retorcidas del siglo XIII. Otros monumentos que puedes visitar en Estella-Lizarra son: la Iglesia del Santo Sepulcro, el Convento de Santo Domingo, el Palacio de Justicia y las ruinas del Castillo Mayor.
Nuestro siguiente destino fue Puente la Reina, un encantador pueblo que nos dio la bienvenida con su impresionante puente románico. Aunque nuestra parada fue breve, aprovechamos para cruzar el puente y recorrer las calles del centro, visitando la Iglesia de Santiago del siglo XII, que alberga la talla de Santiago Apóstol el Mayor, así como la Calle Mayor y la Plaza Julián Mena.
Finalmente, terminamos el día en uno de los lugares más especiales y desconocidos de España: el Cerco Medieval de Artajona. Construido entre los años 1085 y 1109 durante el reinado de Pedro I y Alfonso I el Batallador, destaca como uno de los muchos tesoros de Navarra y se considera el asentamiento fortificado mejor conservado de la región. Puedes optar por un tour guiado si quieres conocer en profundidad su historia. Sus 9 torres defensivas, la Iglesia de San Saturnino y sus grandes murallas defensivas nos impresionaron. Después de disfrutar de un relajante paseo y de una de las puestas de sol más bonitas de Navarra, nos dirigimos a Olite, donde nos alojamos los últimos días. Puedes leer nuestro artículo específico de Artajona.
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👉 Día 4. Ujué, Castillo de Javier, Monasterio de Leyre, Sos del Rey Católico y Olite
Nos despertamos en Olite, con una espectacular vista del amanecer sobre el castillo, y nos dirigimos a Ujué. Esta pequeña villa, con apenas 170 habitantes, se encuentra en la Sierra de Ujué y está declarada como uno de los Pueblos Más Bonitos de España, y ya te avisamos que no es para menos… No tardamos ni 5 minutos en entender por qué. Situado sobre una colina, la panorámica de Ujué es realmente impresionante. Comenzamos nuestro recorrido callejeando por el centro, dejándonos llevar hasta la plaza del Ayuntamiento, rodeados de pequeños edificios de piedra elaborados en mampostería.
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Descendimos hacia la parte inferior del pueblo para visitar las ruinas de la Iglesia de San Miguel, con su fachada románica del siglo XIII y su nave rectangular de estilo gótico. Detrás de ella encontramos los Arcos de la Coronación de la Virgen de Ujué, desde donde obtuvimos otra de las vistas más bonitas del pueblo, que aprovechamos para inmortalizar. De regreso en el pueblo, ascendimos hasta lo más alto, para quemar un poco de calorías y contemplar la Iglesia-fortaleza de Santa María de Ujué, un templo románico del siglo XI. En el siglo XIV fue remodelada y protegida por una muralla de estilo gótico navarro. Nos impresionó su aspecto de castillo, con sus imponentes murallas y torres almenadas, lo que convierte la visita a Ujué en algo obligatorio si piensas conocer Navarra.
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La siguiente parada sería el Castillo de Javier, del siglo X, donde nació y vivió San Francisco Javier. Realizamos una visita guiada, conociendo la vida y obra del santo mientras recorríamos el castillo. Después de aproximadamente 1.30h de visita, nos dirigimos a la localidad de Sangüesa, donde paramos a comer antes de llegar al Monasterio de Leyre. El Monasterio de Leyre es uno de los conjuntos más importantes de España. Aparece en escritos desde el siglo IX y en su interior se encuentran enterrados los primeros reyes del Reino de Pamplona. La visita es por libre y, tras adquirir tu entrada, te entregan una llave, sí, has oído bien, una llave con la que puedes abrir y cerrar las diferentes puertas.
La primera sala que visitamos fue la cripta, que, aunque no se tiene evidencia de que haya sido empleada para tal fin, destaca por los grandes capiteles sostenidos por diminutas columnas. ¡Una verdadera maravilla! Continuando por el Paseo del Monasterio, disfrutamos de los jardines que rodean al edificio principal hasta llegar a la Porta Speciosa, la primera ampliación de la iglesia original de estilo gótico. Nos quedamos asombrados por la cantidad y calidad de imágenes talladas en el tímpano y las arquivoltas, llenas de animales, demonios y santos. Por si todo esto fuera poco, en el interior del templo pudimos disfrutar de los cánticos de los monjes. En fechas señaladas, se pueden escuchar cantos gregorianos por parte de los monjes del monasterio.
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Para terminar la tarde, hicimos un pequeño desvío y cruzamos a Zaragoza para visitar Sos del Rey Católico. Este pequeño pueblo medieval también está considerado como uno de los Pueblos Más Bonitos de España y es el lugar de nacimiento de Fernando II de Aragón. Realizamos un tour guiado, comprando las entradas en la oficina de turismo, recorriendo todo el casco histórico mientras nos narraban los importantes acontecimientos históricos.
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Si visitas Sos del Rey, no puedes perderte la Iglesia de San Esteban y su Cripta, con unas pinturas góticas increíbles, la judería, el Portal de la Reina y la Plaza de la Villa. De regreso en Olite, decidimos seguir explorando el casco histórico mientras buscábamos un lugar para cenar, recorriendo sus calles medievales y observando la cantidad de iglesias y antiguas casas nobles que posee. ¡Puedes hacer este mismo itinerario en una excursión organizada con guía!
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👉 Día 5. Ciudad Romana de Andelos, Villa de las Musas de Arellano, Castillo de Olite, Bardenas Reales y Tudela
Nuestro último día explorando Navarra fue todo menos tranquilo. Comenzamos el día visitando la Ciudad Romana de Andelos, un lugar que respira historia y que fue un centro comercial y de transporte crucial en la Hispania Romana. Durante el recorrido, nos dejamos llevar por los vestigios de la ciudad romana y su imponente acueducto, hasta llegar al centro de esta gran urbe antigua. Allí, exploramos los restos de la Casa de Baco, las termas y el Impluvium. Tras recorrer todo el recinto, nos dirigimos al segundo yacimiento, la Villa de las Musas de Arellano. Aprovechamos la entrada combinada que incluye: la villa, junto a Andelos y el Castillo de Olite.
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Esta villa, que data entre los siglos I y V d.C., se cree que fue un enclave de gran importancia. Allí, hombres libres y esclavos trabajaban las tierras circundantes y almacenaban cosechas, ganado y, especialmente, valioso vino. Uno de los hallazgos más destacados fue el mosaico de «las musas», que ahora se conserva en el Museo Arqueológico Nacional en Madrid. Aunque el yacimiento no es muy extenso, es una visita obligada donde podrás disfrutar con los mosaicos repartidos por las diferentes estancias, objetos utilizados en la labranza, vasijas y un antiguo edificio que se cree que fueron las caballerizas.
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De vuelta en Olite, nos adentramos en el majestuoso Palacio Real de Olite, también conocido como Castillo de Olite. No exageramos si te decimos que este castillo puede ser uno de los más bonitos de España. Su construcción se inició en 1402 y los arquitectos tuvieron en cuenta el origen francés de Carlos III, reflejándolo en el diseño del palacio. A pesar de sufrir un gran incendio en 1813 que lo dejó en ruinas, no fue hasta el siglo XX que se reconstruyó. No puedes abandonar Navarra sin visitarlo. Pasamos alrededor de 2-3 horas explorando cada torre, cada galería, disfrutando del palacio y de las vistas panorámicas sobre Olite y los paisajes circundantes. Nos cautivó especialmente la exposición que detallaba la historia y la reconstrucción del castillo. Tras tanto subir y bajar escaleras, recargamos energías en uno de los mesones de Olite.
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Después de una deliciosa comida, nos pusimos en marcha de regreso a casa, pero no sin antes hacer dos paradas técnicas. La primera fue en las Bardenas Reales, el desierto más grande de Europa. Este paisaje, que parece sacado de otro planeta, está formado por suelos arcillosos, de arenisca y yesos, erosionados para crear formas sorprendentes e inexplicables. Visitamos puntos destacados como el Castildeterra, el Barranco Grande y Caídas de la Negra, hogar de aves rapaces y pequeños reptiles. La visita, que se realiza en coche o en bicicleta debido a su inmensidad, nos dejó maravillados. Como curiosidad, encontramos una base militar en el centro, que aún está en uso. ¿Sabías que este desierto perteneció a la Corona navarra? Es más, en la actualidad pertenece a la Corona española.
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Nuestro último destino del viaje a Navarra fue Tudela, conocida por los famosos Espárragos de Tudela. No te preocupes que ahora no te vamos a hablar de comida jejeje. Pasamos 2 horas recorriendo el casco histórico y visitando la impresionante Catedral de Tudela. Admiramos su magnífico interior y, sobre todo, su claustro, adornado con columnas llenas de detalles, para nosotros una de las visitas obligatorias de la Comunidad Foral. Para finalizar nuestro gran viaje, nos concedimos un helado y visitamos la Plaza de los Fueros de Tudela, un amplio espacio abierto presidido por un templete, que nos encantó.
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🛏️ Dónde dormir en Navarra
Nuestra primera parada en Navarra nos llevó al Hotel Plazaola, ubicado en Irurtzun, justo al lado de Pamplona. Elegimos este hotel por su ubicación estratégica, cerca de todos los lugares que queríamos visitar en el norte de Navarra. Optamos por una habitación que incluía desayuno, y la experiencia fue genial. Podíamos elegir entre varias opciones para el desayuno, que nos preparaban al momento como en un bar. La habitación era perfecta, espaciosa, impecable y equipada con todo lo que necesitábamos para nuestra estancia. Puedes consultar tu habitación en este enlace.
Para los últimos días, nos trasladamos al Hostal 18 de Abril, ubicado en el corazón de Olite. Este lugar era como tener un apartamento para nosotros solos, ya que disfrutamos de dos habitaciones y dos baños exclusivos. El hostal está rodeado de buenos restaurantes y tabernas, lo que hizo nuestros días en Olite fueran aún más agradables. Además, para completar la experiencia, el alojamiento ofrecía un pequeño desayuno gratuito para todos los huéspedes. Consulta sus habitaciones disponibles aquí.
Realmente nos sentimos muy cómodos en ambos alojamientos, y lo mejor de todo es que son muy asequibles. No podemos hacer otra cosa más que recomendar estos dos lugares si estás planeando visitar Navarra. ¡No te arrepentirás!
⭐ Recomendaciones
- Planifica tu itinerario con antelación y considera la opción de adquirir entradas combinadas para lugares como el Castillo de Olite, esto te permitirá ahorrar dinero y tiempo en tu visita a otros sitios de interés.
- Para explorar Navarra a fondo, te recomendamos dedicar al menos 5 días, ya que es una comunidad extensa con una gran variedad de lugares por descubrir.
- Navarra es un destino versátil que puede disfrutarse en cualquier época del año, pero es importante que consideres la temporada para actividades específicas. Por ejemplo, el otoño y la primavera son ideales para visitar el Nacedero del Urederra, mientras que los Sanfermines se celebran en julio.
- Si buscas maximizar tu tiempo y movilidad, te recomendamos alojarte en Pamplona o en lugares cercanos. Sin embargo, también puedes seguir nuestro ejemplo y optar por alojamientos en diferentes áreas para evitar los largos desplazamientos y sacarle unas horas extra a cada día.
- Antes de visitar monumentos o atracciones turísticas, verifica si es necesario realizar reservas previas. Algunos lugares requieren que reserves con semanas de antelación, así que asegúrate de confirmar que vas a poder entrar.
👍 Lo que más y menos nos ha gustado de Navarra
Lo que más nos ha gustado de Navarra:
- Calidez de su gente: una de las mejores experiencias durante nuestro viaje ha sido el trato con la gente de Navarra. Fuimos muy bien recibidos desde que llegamos y según fuimos recorriendo la comunidad nos siguieron tratando de lujo.
- Diversidad de paisajes: Navarra nos sorprendió con su increíble diversidad de paisajes. Puedes visitar el desierto más grande de Europa, las Bardenas Reales, y subiendo hacia el norte llegar al segundo bosque más grande de Europa que es la Selva de Irati. Estos contrastes nos han dejado boquiabiertos y respecto al paisaje, creemos que es la comunidad más completa en la que hemos estado.
- La gastronomía: sin lugar a dudas, uno de los puntos destacados de nuestro viaje fue la gastronomía navarra. Desde los pintxos hasta los contundentes platos de cuchara, hemos disfrutado cada comida. Que no se te olvide probar la Panchineta, que es nuestro postre navarro favorito!!!
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Lo que menos nos ha gustado:
- La cuajada quemada: aunque estábamos encantados por probar la cuajada, nos llevamos una pequeña decepción al descubrir que la versión quemada no era nuestro punto fuerte. De hecho, al principio pensábamos que estaba mala, hasta que nos confirmaron que en Navarra se consume así, no todo podía ser perfecto.
- Catedral de Pamplona: aunque Pamplona tiene muchos encantos, la Catedral no nos parece uno de ellos. Es un edificio un tanto difícil de mirar… y rompe con la estética de la ciudad. Pero ojo, si entras al interior la cosa cambia.
- Tudela: a pesar de tener la encantadora Plaza de los Fueros y su imponente catedral que nos encantan, el resto de Tudela no cumplió completamente nuestras expectativas. Nos decepcionó un poco la falta de encanto en otras áreas del pueblo.
Ya conoces nuestras aventuras por Navarra, un viaje poco tranquilo… pero te podemos asegurar que lo disfrutamos al máximo. Ahora te toca a ti venir a visitar Navarra y recorrer todos estos sitio. Si quieres completar esta guía de 5 días, puedes leer nuestros otros artículos sobre Navarra: Qué ver en el Pirineo Navarro, Qué ver en Olite, el Cerco medieval de Artajona, o Qué ver en Pamplona. ¡Nos vemos en un próximo Plan D, descubrir mundo!
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